Imagina tu coche favorito, con solo unos años, mostrando ya signos de óxido. ¡Esta es la peor pesadilla de todo propietario de un coche! Para evitar este escenario, los fabricantes de automóviles invierten mucho en tecnologías avanzadas anticorrosión. Pero, ¿cómo evalúan la eficacia de estas soluciones? Entra en el Prueba de Corrosión Cíclica (CCT) , un riguroso "inspector de calidad" que simula entornos hostiles para acelerar la corrosión y evaluar la durabilidad de los materiales y recubrimientos. Aquí tienes una inmersión profunda en el mundo de las normas de ensayo de corrosión automotriz.
En términos sencillos, la CCT es un método de ensayo de corrosión acelerada que reproduce las condiciones del mundo real, como climas marinos, contaminación industrial o sal de carretera en invierno, mediante la alternancia de temperatura, humedad y exposición a niebla salina. Este proceso acelera la corrosión de materiales y componentes, proporcionando a los fabricantes de automóviles datos fiables para evaluar el rendimiento anticorrosión.
- Evalúa el rendimiento anticorrosión: La CCT evalúa materiales, recubrimientos y componentes automotrices completos para ayudar a los fabricantes a seleccionar las mejores soluciones.
- Predice la vida útil: Al acelerar la corrosión, la CCT estima cuánto durarán las piezas en condiciones reales, guiando las mejoras de diseño.
- Optimiza las estrategias de protección: La prueba ayuda a refinar los enfoques anticorrosión, como la elección de mejores recubrimientos o diseños estructurales.
- Garantiza la calidad: Como herramienta clave de control de calidad, la CCT garantiza el cumplimiento de las normas del sector, lo que aumenta la competitividad en el mercado.
Los fabricantes de automóviles y los grupos del sector siguen varios protocolos CCT. A continuación se presentan algunas de las normas más utilizadas:
Esta prueba evalúa el comportamiento a la corrosión en materiales y recubrimientos automotrices, simulando condiciones reales para obtener resultados diferenciados.
- Método: Las muestras se colocan en una cámara con un ángulo de 65°–75°, expuestas a una pulverización de sal de cloruro de sodio al 1% (pH 6,5–7,2) a 2,0–4,0 ml/80 cm²/hora.
- Ciclo: Un ciclo de 7 días incluye fases de varios pasos con temperaturas que oscilan entre -15°C y +50°C y niveles de humedad del 50%–95%.
- Duración: Normalmente seis semanas (seis ciclos completos).
Utilizada por Volvo y Scania (STD 423-0069), esta prueba evalúa los materiales expuestos a entornos ricos en cloruros, como condiciones marinas o de sal de deshielo.
- Método: Las muestras se someten a climas alternos: 6 horas a 25°C/95% HR con pulverización de sal, 2,5 horas de transición a 50°C/70% HR y 15,5 horas a 50°C/70% HR.
- Ciclo: Un ciclo de 7 días concluye con 48 horas a 50°C/70% HR.
Esta prueba de dos partes evalúa los componentes del chasis de alta tensión (por ejemplo, subchasis, brazos de control) en climas alternos.
- Prueba de componentes INKA: Alterna fases secas (40°C/40% HR), pulverización de sal (35°C), húmedas (40°C/95% HR) y de humedad controlada (50°C/80% HR).
- Prueba climática PV 1200: Ciclos entre temperaturas extremas (+80°C/-40°C) con 80% HR.
- Duración: Seis semanas (seis ciclos).
Un ciclo de 24 horas que simula entornos complejos:
- Inmersión en sal (50°C, 2h) → Humectación (50°C/95% HR, 8h) → Secado (70°C/30% HR, 1,5h) → Congelación (-20°C, 20min).
Cinco niveles de ensayo de corrosión, incluyendo pulverización de sal, resistencia al rayado y corrosión de bordes. Por ejemplo:
- Ensayo de nivel 2/3 (MAZDA MCT-2M): Ciclos de 24 horas (6h de pulverización de sal, 3h de secado, 14h de humectación) repetidos 60–120 veces.
Estas normas miden el óxido, las ampollas y la adhesión en ciclos de pulverización de sal, secado y humectación. Las variantes incluyen:
- CCT-I: Resistencia general a la corrosión (por ejemplo, paneles de la carrocería, ruedas).
- CCT-V: Penetración interna de óxido acelerada (por ejemplo, piezas de estructura en caja).
Al aplicar rigurosamente estas pruebas, los fabricantes de automóviles garantizan que los vehículos resistan los elementos, ofreciendo longevidad y fiabilidad a los conductores de todo el mundo.

